El papa Francisco no deja de recordarnos que los cristianos debemos ser una Iglesia en “salida”, es decir, tenemos que estar lanzados a la calle para buscar la manera posible de hacer que la buena noticia de Jesús llegue a todo el mundo. Una Iglesia encorvada sobre sí misma, además de dar una imagen muy fea de sí misma, más pronto que tarde, puede llegar a enfermar. Otra cosa que recuerda también a los sacerdotes es que una manera muy acertada de mostrar que somos una Iglesia en salida es procurar tener las puertas abiertas de las parroquias el mayor tiempo posible.

Todos somos sabedores, muchos por propia experiencia el inmenso bien que en ocasiones nos ha hecho un encuentro silencioso con el Santísimo Sacramento, con la Virgen María. Ir por la calle como un sonámbulo, totalmente destrozado por ciertos problemas e inquietudes y de pronto encontrarte con las puertas abiertas de un Templo, entrar en él, quedarte en silencio, con el ambiente sagrado que allí se respira, te va devolviendo la paz, y poco a poco vas viendo las cosas de otra manera. Entras derrumbado y sales lleno de esperanza, con ilusión de ser capaz de afrontar, con la gracia de Dios, todos los problemas con los que uno pueda encontrarse. 

Pues esto es Radio María, una parroquia siempre abierta, capaz de ayudarnos a vivir de otra manera. El otro día, en el programa “Sexto Continente” del obispo Munilla, escuché el testimonio de una señora que me impresionó sobre manera. En una de las preguntas de los oyentes, en las que la gente pide ayuda o consejo de cómo actuar, una buena señora contó que tenía tres hijos, ya mayores, los tres con trastornos psíquicos y tratamiento psiquiátrico. Si a veces en personas muy cuerdas las relaciones familiares son duras, uno puede imaginarse qué cantidad de choques, de incomprensiones, tal como nos contaba la buena mujer, pueden darse. La mujer reflejaba el calvario que tenía que vivir cada día, pero a la vez confesaba la fortaleza que tenía al encontrar tantas luces, tantos consejos, que en un programa u otro le iban llegando a través de las ondas de Radio María, y que le ayudaban a vivir. La mujer llegó a confesar que en estas tensiones también sufría el distanciamiento con su marido. A lo que el Obispo le hizo ver que la unión del matrimonio es esencial para sobrellevar mejor estos casos. Mons. Munilla no pudo por menos que decir en este momento, después de acabar de responder a la señora, qué milagro supone Radio María que hace tanto bien. Es la Virgen María quien lo hace todo, terminó diciendo. 

Hace unos días se celebró aquí en el Albacete un encuentro regional de voluntarios de Radio María. Es el primero que se celebraba en nuestra ciudad. Se encontraban gentes de Alicante, Orihuela, Yecla, Cartagena, Murcia y los voluntarios de nuestra Diócesis, algunos venidos de Hellín y de Albacete capital. Acompañaron el Encuentro algunos responsables de voluntariado desde Madrid. ¡Qué suerte poder participar en este encuentro! Y sentí esa gran alegría de saber que a través de las Ondas mucha gente se encuentra con la gracia de la presencia de Dios y la alegría de vivir con esperanza. ¡Cuánto bien hace esta Parroquia de puertas abiertas cuando hace posible que muchas casas, muchas familias se puedan convertir en pequeños templos para orar, escuchar la Palabra de Dios y también adorar a la Eucaristía!

Programación
Me gustó mucho al ver cómo la Radio de la Virgen, Madre de Misericordia, ha estado respondiendo a todo lo que este año Jubilar hemos celebrado. Un dirigente nos fue analizando los diferentes programas que van respondiendo a las Obras de Misericordia.

En la Programación de Radio María he podido comprobar que hay secciones para enfermos, encarcelados, niños, jóvenes, gentes que tienen problemas con adicciones o problemas familiares. Pero además tiene otras muchas cosas. Cada día se celebra la Santa Misa, el Oficio Divino de Laudes y Vísperas y la Oración de la mañana y de la noche. El Santo Rosario, varias veces. Se explica el Catecismo de la Iglesia Católica y un experto en Biblia analiza las lecturas de la Misa de cada día. Hay informativos sobre la marcha de la Iglesia en España y en el mundo. Por sus programas desfilan montón de misioneros, testigos que nos hablan a lo vivo de la Misión de la Iglesia. Radio María se hace eco cada día de los Mensajes del Papa. También hay informativos sobre la vida política y social. 

Además, ésta es una Radio que no tiene fines comerciales, vive de donativos y con voluntarios que ofrecen su tiempo para evangelizar y para ayudar a vivir.                                             

Soy testigo de esto último por algunas confidencias en que me confiesan que gracias a Radio María siguen adelante, de otra manera no saben qué hubiera pasado con su vida.

La sede del Voluntariado de Radio María en nuestra Diócesis está en la parroquia de la Purísima de Albacete. A quienes se sientan llamados a participar en este voluntariado, los esperamos. Demos gracias a Dios por esta parroquia que tiene las puertas abiertas noche y día.