Queridos amigos,

La Navidad nos llega y se hace presente en un Dios hecho carne con la humanidad y nos invita a un encuentro gozoso entre familiares y amigos, aunque muchos de nosotros tengamos que conformarnos con una tarjeta o carta navideña. Que el nacido en Belén llene vuestros corazones y vidas de su gozo y esperanza.

Cuando escribo esta carta pienso en cada uno de vosotros y aprovecho para compartir algo de mi vida y trabajo, de la situación de este pueblo y Iglesia que hacemos cada día. La verdad es que ha sido uno de los años en los que me he encontrado más desbordado, mucho viaje y encuentro dentro y fuera del país, a nivel del Africa Austral en Maputo, Mozambique, a nivel continental, Kinshasa, DRC, a nivel internacional, dos veces en Roma, la última para concelebrar con el Papa y Obispos de todo el mundo la Misa de apertura del Año de la Fe. La salud me ha respetado y eso sí he trabajado con mucha ilusión.

La situación del país sigue con muchos interrogantes y un futuro incierto; aunque es verdad que hemos gozado de una paz y estabilidad relativa, de que se encuentra en el mercado casi toda clase de alimentos, pero estos son  accesibles solo a una minoría, dado que la dolarización de la economía ha dejado a la mayoría del pueblo sin acceso al dólar y por tanto a alimentos, sanidad y educación. De ser trillonarios hace muy poquito tiempo debido a la híper-inflación, con el dólar americano han pasado a no verlo ni en pintura. Nuestra gente cultiva el maíz para comer y el algodón para hacer frente a sus gastos del año pero con el precio de este año no han podido ni pagar la deuda contraída por las semillas y fertilizantes, ello ha afectado seriamente a la economía de la provincia y naturalmente al apoyo económico de la iglesia del que dependen nuestras misiones.

Después de más de tres años preparando la nueva constitución y de ésta ser aprobada por los tres partidos en el poder hace ya más de 6 meses, ésta no ha podido ir todavía al parlamento porque el partido en el poder de siempre y el líder de siempre han presentado a última hora nada menos que 263. Enmiendas. El año 2013 será  un año decisivo con el referéndum sobre la constitución y las elecciones presidenciales, parlamentarias y municipales. Nuestra esperanza sigue firme porque sabemos que detrás de los nubarrones vendrá cielo claro.

Mejor perspectiva se presenta en el campo eclesial, aunque andamos también faltos de una nueva evangelización ante la agresividad de las sectas, la dictadura del poder, la corrupción y la pérdida de valores humanos y cristianos que nos ha traído esta situación que vivimos ya más de 12 años, pero la Iglesia sigue gozando de buena salud y también de vocaciones.

Muchos eventos nos traerá el Año de la Fé al que miramos con ilusión: la ordenación de 4 nuevos sacerdotes, la bendición de una nueva misión y la construcción y apertura de otra, la bendición del santuario diocesano con su casa de retiro y el nuevo Seminario Propedeútico de San Pablo.

Os recuerdo con cariño en la oración estos días deseándoos las bendiciones del Niño Dios durante el Año 2013.

Un fuerte abrazo,

Angel