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24 de mayo de 2011

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«Necesitamos un piso para un nuevo proyecto»

Berta Tena es una de las Hijas de la Caridad que trabajan en el Barrio de la Milagrosa, las Seiscientas. Nos cuenta que las Hermanas de la Caridad están en este barrio desde el año 1983, viendo y escuchando el clamor de los pobres y marginados, para promocionarlos e integrarlos en la sociedad a través de muchos proyectos que llevan adelante, como el Proyecto Amanece, que empezará en septiembre, para atender a las chicas jóvenes que tienen embarazos no esperados y quieren seguir adelante con la vida que se está gestando en ellas. Berta Tena nos dice que es un proyecto de todos y lo primero que hace falta es un piso, un sitio donde estar.

– Berta, lleváis en las Seiscientas casi 30 años, desarrollando la labor de la primera Hija de la Caridad, Margarita Nasseau.
– La Obra Social Margarita Naseau surgió para dar respuesta a las necesidades que la gente nos iba pidiendo. San Vicente de Paúl nos decía que teníamos que tener los ojos y los oídos abiertos, para ver y visualizar las necesidades y oír el clamor de los pobres.

– Y bien que lo escucháis, porque desde entonces hasta ahora, hay muchos proyectos.
– Tenemos el Proyecto ALCA, de alternativa a la calle para jóvenes de 16 a 22 años. Otro de apoyo a la infancia, que hacemos en horario extraescolar, para promocionar desde la educación y la cultura a los niños de allí del barrio, también con actividades deportivas y lúdicas como forma de integración. Además, tenemos un proyecto de madres adolescentes, para que sepan desenvolverse bien en la organización de la casa y el cuidado de sus hijos; en tres pisos de acogida atendemos a personas inmigrantes, y en el Colegio de la Paz hay un proyecto que son comunidades de aprendizaje, en el que colaboramos con dos de los mediadores que allí están.

– ¿Cómo acogéis a todas estas personas?
– Queremos ser referencia para todos los que están en contacto con nosotros: Ante las dificultades y en las alegrías, les brindamos nuestra casa, les acogemos desde lo que ellos son; no hay que mirarlos por la apariencia física, porque detrás de esos harapos y de esas formas que no son las adecuadas, hay hijos de Dios y tenemos que tratarles así.

– Qué bien os viene el nombre de Hijas de la Caridad: Seis mujeres que estáis ahí, dedicando vuestra vida con tanta ilusión, qué tarea más hermosa de la Iglesia en esos barrios. Queremos ser para ellos como su familia. Puede haber muchas críticas a la Iglesia, pero no cerremos los ojos a esta realidad. Veamos, ¿Qué necesitaríais, Berta?
– Pues sobre todo, el apoyo humano de todas las personas de buena voluntad, porque estamos ahí como Hijas de la Caridad y como Iglesia. Intentamos vivir desde esa Iglesia samaritana que está cerca del que sufre y le tiende la mano. A veces, es verdad que no tenemos los medios suficientes para dar toda la respuesta que nos piden.

– Proyecto Amanece, qué nombre tan bonito. ¿A quiénes vais a acoger?
– Es para chicas jóvenes entre 16 y 22 años que están embarazadas y quieren continuar con la vida que llevan dentro de sus entrañas. Lo que nos motivó a ponerlo en marcha es la defensa de la vida desde el momento de su concepción. Es estar junto a ellas, acompañarlas en el proceso de gestación y necesitamos también la colaboración voluntaria en el seguimiento de estas chicas en las consultas médicas, ante cualquier necesidad… porque queremos también darles una promoción e integrarlas en la sociedad.

– Pero lo primero que necesitáis es un piso, un sitio donde estar, y a lo mejor es bueno que no esté en las Seiscientas… Hay gente que tiene pisos cerrados y que os lo puede dejar… Hasta la ayuda más pequeña que se pueda hacer, bien merece la pena. Berta, danos vuestro número de teléfono.
– Podéis llamarnos al 967 21 24 30 o por correo electrónico: osmargarita@hotmail.com También hemos elaborado unos trípticos que hoy se repartirán en las parroquias porque creemos que es un proyecto eclesial. Invitamos a la colaboración para que este proyecto no se venga abajo por falta de medios, pues el valor de la vida es mucho más valioso que lo que puede ser una aportación económica.