25 de marzo de 2012
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[fusion_dropcap color="var(--awb-color2)" class="fusion-content-tb-dropcap"]S[/fusion_dropcap]i toda educación es difícil, lo es especialmente hoy la educación para vivir de manera verdadera y plena la sexualidad y la afectividad, tarea que es necesario incorporar en nuestras actividades educativas y pastorales.
“APRENDAMOS A AMAR”, es el título de un curso preparado para capacitarnos en esta tarea, que se dirige a padres, educadores, profesores, catequistas, agentes de pastoral, jóvenes, novios, sacerdotes y religiosos/as, para que, conociendo y comprendiendo las diversas etapas del desarrollo psicosexual, puedan acompañar a los niños y jóvenes en la educación para el amor, tanto en la familia como en la escuela.
Su objetivo es la formación de monitores de educación afectiva y sexual, y se va a celebrar en Albacete, en la Parroquia de la Asunción. El plazo de inscripción está abierto hasta el 30 de abril, en el Obispado de Albacete, teléfono 967 21 44 78. El curso está organizado por el Secretariado Diocesano de Familia y Vida, y lo imparte la Fundación Desarrollo y Persona de Valladolid. Julián García Velasco, Delegado de Familia de nuestra Diócesis, nos ofrece más información en esta entrevista.
– Julián, si el curso se va a hacer en tres fines de semana repartidos entre octubre, noviembre y diciembre ¿por qué te urge que lo anunciemos ya?
– Porque necesitamos saber con qué gente contamos, cuántos son los inscritos, porque es un curso que necesita una cierta anticipación y preparación. Y al mismo tiempo no va a ser masivo, sino que el número de participantes tiene que ser adecuado para que sea dinámico y motivador.
– Se trata de la formación de monitores para la educación afectiva y sexual. ¿Cuáles son los contenidos?
– El curso se enmarca dentro de la urgencia y la emergencia educativa de la que el Papa habla frecuentemente. Su título es “Aprendamos a Amar”; dentro del amor se encuadra la afectividad y la sexualidad. Se estructura en tres partes, repartidas en tres fines de semana. El primero es el 27 y 28 de octubre, sobre el desarrollo afectivo y sexual, partiendo desde los 0 a los 12 años de edad, con temas como “Persona y encuentro”, “Somos personas sexuadas” y “Pubertad: cambios fisiológicos”. También haremos un taller sobre situaciones cotidianas.
– Los talleres que tiene el curso nos ayudarán a saber responder a las dudas y preguntas que tienen los niños y adolescentes ¿verdad?
– Precisamente habrá dos talleres sobre esto. Continuando con el programa del curso, la segunda parte será en el fin de semana del 24 y 25 de noviembre, sobre el arte de comunicarse, en la que se explicará el desarrollo psicosexual en la adolescencia, con contenidos como “La atracción al amor como tarea”, “El arte de acercarse al otro y relacionarse”, y “Embarazos y ETS en la adolescencia”.
– La tercera parte se centrará en el amor y la sexualidad y en la problemática de la contracepción.
– Si. Begoña Ruiz Pereda, profesora de la Fundación Desarrollo y Persona que impartirá el curso, también nos hablará en el último fin de semana, que será el 15 y 16 de diciembre, sobre “Amar con el cuerpo”, “Aspectos morales de la regulación de la natalidad” y “Hacerse adulto”.
– Hoy simplemente se entiende muchas veces educación sexual como genitalidad y temas anticonceptivos.
– Exactamente, la sexualidad se banaliza, se trivializa, se hace una cosa de objeto de consumo y no se desarrolla la profundidad interpersonal, humana, liberadora que tiene la sexualidad como el mayor don de Dios, después de la vida que Él nos ha dado. Por otro lado, sigue siendo tabú la educación afectivo sexual de los padres hacia los hijos, por eso es necesario que ellos vigilen, que acompañen, quién da la educación afectivo sexual a los hijos, porque ellos son los primeros responsables, y entonces hay que contar con monitores como los que prepara este curso que está extendido casi por toda España y también por América Latina.
– Qué bien si en todas las parroquias hubiese monitores para esta educación.
– Ya hay dos experiencias en Albacete que se están haciendo en la Parroquia de San Pablo de los Salesianos y en la Parroquia de la Asunción con gente que el año pasado estuvo en Gandía haciendo este mismo curso, que está obteniendo óptimos resultados.