La Iglesia se prepara para la elección de un nuevo sucesor del Apóstol Pedro. Lo hace en la Basílica de San Pedro, celebrando la Misa “Pro Eligendo Pontificem”.

Tras el rezo del Rosario en latín, en la Basílica llena de fieles, ha comenzado la Celebración de la Eucaristía, presidida por el Cardenal Decano del Colegio Cardenalicio, el Cardenal Angelo Sodano.

Los fieles han llenado el templo para acompañar a los Cardenales en los últimos momentos antes del inicio del Cónclave. Durante la celebración, todos los presentas han rezado por el próximo Pontífice y por los Electores, para que se dejen guiar por el Espíritu Santo ante la delicada tarea que comienzan esta tarde.

En su homilía, el Cardenal Decano ha comenzado dando gracias a Dios por asistir a su Iglesia. También, por el “luminoso Pontificado” del “amado y venerado Pontífice Benedicto XVI”, a quien ha renovado en nombre del Colegio Cardenalicio, su gratitud, provocando el aplauso de Cardenales y fieles.

También se ha referido a la misión que con el Espíritu Santo desempeña todo Sacerdote, y de manera especial compromete el “Obispo de Roma, Pastor de la Iglesia universal”. El amor – a dicho- “empuja a los pastores de la Iglesia a desarrollar su misión de servicio a los hombres de cada tiempo” para ofrecerles “la luz del Evangelio y la fuerza de la gracia”.

Así mismo, se ha referido a la riqueza de carísmas que el Espíritu otorga a su Pueblo, – representada allí, por miembros de Iglesias orientales y el Hermano Alois, de la Comunidad Ecuménica de Taizé- y ha destacado que todos “somos llamados a cooperar con el Sucesor de Pedro, fundamento visible de tal unidad eclesial.”

Antes de finalizar se ha referido a la misión del Papa, que como buen Pastor debe “dar la vida por sus ovejas” pues “cuánto más alto y más universal es el oficio pastoral, tanto más grande tiene que ser la caridad del Pastor”. Y ha expresado la necesidad de que el nuevo Pontífice las “muchas iniciativas benéficas hacia los pueblos y la comunidad internacional, promoviendo sin cesar la justicia y la paz […] a nivel mundial.”

Ha concluido pidiendo oración para que “Señor nos conceda a un Pontífice que desarrolle con corazón generoso tal noble misión”.