4 de agosto de 2006
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Del 22 al 26 de julio ha celebrado la HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica) en Salamanca, las Jornadas Abiertas de verano que con el lema «Promover la cultura de la vida en el mundo obrero» nos ha permitido a más de doscientos militantes y simpatizantes orar y debatir sobre la precariedad laboral y su repercusión en la salud. Nos han ayudado en esta reflexión Joseph Antoni Ybarra, catedrático de economía en la Universidad de Alicante; y Juan Francisco Garrido, militante de la HOAC de Córdoba.
Como militantes cristianos queremos vivir nuestra vida y nuestra fe con esperanza a pesar de encontrar signos de muerte y sufrimiento. Queremos vivir nuestro compromiso cristiano, anunciando y testimoniando al Dios de la vida, desde las condiciones adversas de precariedad y sufrimiento que padece el mundo obrero.
Constatamos que el actual modelo de desarrollo económico no facilita ni posibilita la realización plena del hombre y de la mujer de hoy, al convertirlos en un instrumento más del sistema de producción, ni permite que puedan desarrollar plenamente sus capacidades humanas (personales, familiares, sociales… ).
Asimismo, la promoción de una cultura de la vida se encuentra seriamente afectada por la precariedad laboral que tiene unas enormes repercusiones en la salud de los trabajadores.
Por otra parte, la no intervención en el mercado laboral por parte de los poderes públicos, la destrucción del tejido productivo, que hace imposible la acción sindical, la degradación del mercado de trabajo… y por consiguiente de las personas que lo sufren, son otros elementos que repercuten directamente en la salud de los trabajadores. La técnica no ha traído la liberación a la persona; es la ética y la moral el camino para conseguirla.
Denunciamos:
Afirmamos desde la Doctrina Social de la Iglesia que la persona es el centro y por tanto principio y medida de todo: de la economía, de la política, del trabajo, de la educación…
La HOAC como movimiento de militantes obreros cristianos nos sentimos llamados a potenciar la vida y la salud de nuestros compañeros y compañeras, y a buscar una manera de organizar el trabajo que lo haga posible. Nos sumamos a las organizaciones que promuevan iniciativas para mejorar las condiciones de vida y trabajo del mundo obrero e invitamos a todos a que participen de ellas.