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2 de marzo de 2014

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La tradicional cita anual de la Jornada en que la Iglesia de Dios en España celebra el “Día de Hispanoamérica”, que tiene lugar el 2 de marzo, está marcada por el hecho inédito de la presencia del primer papa venido del “Nuevo Mundo” americano en la historia de la Iglesia católica. Celebrar esta Jornada en tiempos del pontificado del papa Francisco tiene implicaciones y repercusiones de especial magnitud. Es una llamada a intensificar y profundizar los vínculos que unen a España con Hispanoamérica y a fortalecer la comunión evangelizadora entre sus Iglesias.

El lema escogido para esa Jornada ha sido “La alegría de ser misionero”. Sin duda, ese lema evoca la respuesta gozosa a aquella vocación que ha llevado y animado, desde el encuentro con el “Nuevo Mundo” hasta la actualidad, a millares de misioneros españoles a dejar a sus terruños, diócesis y comunidades de origen para ponerse al servicio de la evangelización americana. 

No olvidemos que, en el tiempo del pontificado del papa Francisco, la Providencia de Dios ha colocado a las Iglesias de América Latina en una situación singular. Han de asumir nuevas responsabilidades, exigencias y desafíos. Toda su vida, estructuras y actividades han de estar renovadas desde el paradigma misionero. Un nuevo ímpetu y creatividad ha de manifestarse en su “misión continental”. Todo el Pueblo de Dios ha de ponerse en camino misionero. 

Albacete cuenta con siete sacerdotes misioneros de la OCSHA, y el año pasado colaboró con 1.761,50 euros en esta campaña. Los sacerdotes misioneros están presentes en Guatemala, Chile, Argentina y Ecuador.