[fusion_dropcap color="var(--awb-color2)" class="fusion-content-tb-dropcap"]L[/fusion_dropcap]as parroquias del Arciprestazgo 2, la Comunidad Semilla y Cáritas Diocesana de Albacete organizan el primer Campo de Trabajo con Infancia, durante los meses de julio y agosto de 2014. Una actividad de verano solidario que es toda una novedad en la Diócesis de Albacete, dirigida a jóvenes de Albacete entre 16 y 30 años de edad, para hacer un voluntariado con niños de la ciudad en situación de vulnerabilidad, con dificultades de acceso a una alimentación adecuada y a actividades de ocio.

Francisco Javier Avilés, cura párroco de la Parroquia de Santo Domingo y arcipreste del Arciprestazgo 2, nos informa sobre este campo de trabajo y las razones por las que es presentada esta actividad con la expresión del Papa Francisco “Atrévanse a ir contracorriente. Atrévanse a ser felices”.

– Francisco Javier, ¿Qué objetivo tiene este primer Campo de Trabajo con Infancia?
– Principalmente, facilitar tanto un comedor para niños de familias a las que atiende Cáritas, como un trabajo educativo con estos niños, a través de educadores y de jóvenes voluntarios que se presten a ello. También hay un objetivo pastoral, que es acompañar y profundizar con talleres y con trabajo personal, la vocación cristiana de jóvenes de Albacete que, junto con los tres trabajadores del Programa de Infancia de Cáritas, van a hacer el campo de trabajo, y que en su labor de voluntariado estén también preguntándose cómo responder a su fe y a su vocación de una manera social y solidaria.

– ¿Cómo se va a hacer?
– Los niños que van a ser los usuarios de este campo de trabajo serán derivados previamente por las Cáritas parroquiales del Arciprestazgo 2, -también por alguna otra que pueda presentar un caso muy necesitado-. Serán recogidos por la mañana y llevados al Seminario, donde se va a hacer el campo de trabajo. A media mañana tendrán el almuerzo y a mediodía, la comida, y harán una serie de actividades de ocio y educativas, incluido algún día de baño. Los niños estarán cada día en el campo de trabajo hasta las cuatro de la tarde, tras lo que serán devueltos a sus hogares.

– ¿Qué actividades se harán con los jóvenes voluntarios durante el campo de trabajo?
– En las dos horas últimas de la jornada -de cuatro a seis de la tarde-, los voluntarios tendrán actividades tanto de tipo pastoral, de espiritualidad, vocación, conocimiento creyente y cristiano de la realidad, como de tipo específicamente socioeducativo para ser monitores y educadores de niños, para lo cual contamos con la ayuda del Programa de Infancia de Cáritas, que viene realizando durante todo el año su trabajo de acompañamiento y educación con niños de los barrios del arciprestazgo 2.

– Se necesitan voluntarios. ¿Quién puede apuntarse? ¿Cómo lo puede hacer?
– Se pueden apuntar jóvenes de 16 a 30 años de edad, de la ciudad de Albacete. El campo de trabajo se va a realizar durante los meses de julio y agosto, dividido en cuatro tandas: La primera es del 7 al 18 de julio; la segunda, del 21 al 31 de julio; la tercera, del 4 al 15 de agosto y la última, del 18 al 29 de agosto. Pueden apuntarse a través de correo electrónico, enviando su solicitud a programainfancia@caritasalbacete.org, y también pueden localizarnos en cualquiera de las parroquias del arciprestazgo 2, que son El Buen Pastor, las Angustias, la Estrella, la Purísima, Santo Domingo, San José y San Vicente, así como en los despachos del Programa de Infancia que están en la Parroquia de la Purísima y en la Parroquia de Santo Domingo.

– ¿Cuántos voluntarios hacen falta para este campo de trabajo?
– Lo conveniente serían doce por tanda, lo que supone por lo menos cuarenta y ocho jóvenes. Si alguno de los jóvenes que se apunten quisiera repetir, haciendo dos tandas, nos vendría también muy bien si hiciese falta.

– “Atrévanse a ir contracorriente. Atrévanse a ser felices”, así es anunciada esta actividad. ¿Por qué?
Ir a contracorriente tal y como lo hizo Jesucristo, tal y como lo hizo el Señor, supone estar dispuesto a hacer frente a todo aquello que empequeñece la grandeza de la dignidad humana, y una de las cosas que la empequeñece es la pereza, la falta de autoestima, todo aquello que de alguna manera nos está retrasando a la hora de ser generosos y compartir con los demás tiempo y cualidades. Por eso, la frase del Papa tiene esa segunda parte: Atrévanse a ser felices: el que va contra aquello que merma la grandeza del ser humano acaba encontrando su verdadera dignidad y su verdadera meta. Ir a contracorriente en este caso, para los jóvenes que se atrevan a compartir con nosotros esos dos meses de verano, yo creo que también les va a suponer un engrandecimiento moral y social muy alto y creo que van a quedar muy, muy satisfechos.