CECO, el grupo de personas ciegas que camina en la Iglesia como uno más, para ver con los ojos del corazón.

Consuelo García Serrano es la presidenta de la Asociación de Ciegos Españoles Católicos (CECO) en Albacete, y le gusta que le llamen Chelo. Pide la colaboración de las personas videntes para ayudar a este grupo en las tareas que sus socios no pueden desarrollar por sí mismos, con el objetivo de caminar todos unidos en la Iglesia, y ver con los ojos del corazón.

– Chelo, ¿Qué es CECO?
– Es un grupo para el que lo más importante es caminar en la Iglesia como otros grupos y pretendemos ser el granito de arena de personas invidentes para ver con los ojos del corazón.

– Veo que has leído en lenguaje Braille “El Principito”, porque has dicho una frase del principito: sólo se ve bien con los ojos del corazón.
– El Principito me lo ha soplado.

– Asociación de Ciegos Españoles Católicos… ¿Por qué este apellido, católico?
– Estas siglas son porque vamos conjuntamente trabajando con FIDACA (Federación Internacional de Asociaciones de Ciegos Católicos), y en una reunión que tuvieron en Francia surgió la idea de formar CECO aquí en España y empezaron en Zaragoza.

– ¿Cuánto tiempo lleváis en Albacete?
– En Albacete hemos empezado hace unos tres meses.

– Se vé que eres una mujer valiente, intrépida, que no te desanimas.
– Pues no, no me desanimo, gracias a Dios. Él es el que me empuja, el que me da la fuerza para seguir adelante, y como se que es el Maestro y que me lleva de la mano, la verdad es que no me da miedo, me meto en unos berenjenales que la verdad, me dan vida.

– Y benditos berenjenales. ¿Dónde os reunís?
– Estamos en la Parroquia de Nuestra Señora de las Angustias y nuestro capellán es Miguel Brazales, que es el vicario parroquial. En primer lugar, tenemos la oración, meditamos el Evangelio, cada uno lo que nos dice en nuestro corazón, y después hay charlas, que ha venido a darlas la Asociación de Diabéticos.

– ¿Qué pretende CECO?
– Pretende que seamos los ciegos y los videntes un equipo y caminar todos unidos, porque CECO no es un gueto, es un grupo en la parroquia donde queremos colaborar y pedimos la colaboración de las personas videntes para que nos ayuden a caminar en las tareas que nosotros no podemos desarrollar, como leer y llevar hacia adelante toda la administración de los papeleos.

– En estos momentos demandáis de la parroquia, de la sociedad, de cualquiera que se ofrezca, sin distinción de credos ni de nada, un voluntariado que os ayude a caminar, que haga papeles, que os puedan acompañar a algunos sitios… La oferta está hecha, desde aquí la hacemos: se necesita gente de todas las edades, jóvenes, adultos, porque… ¿Qué papeles son esos?
– Hay que llevar los socios que tengo, todavía no hemos empezado a tener la cuota, porque el grupo está empezando a caminar… primero hay que ir a por el hermano, después vendrá la cuota.

– Voluntariado para ayudar a hacer papeles. Y esto, el tiempo que el voluntariado pueda colaborar, por ejemplo, unas dos horas a la semana…
– ¿Dos horas a la semana? Eso sería de categoría.

– Chelo, vas con un perro guía, ¿Cómo se llama?, ¿Y cómo lo has conseguido?
– Se llama COAL. Muy fácil: tienes que estar afiliado a la ONCE, lo solicitas, te ponen en la lista de espera y al final la ONCE te lo da, te lo regala.

– Chelo, de vez en cuando nos veremos con los ojos del corazón y hablaremos de CECO. Vamos a seguir ese crecimiento.
– Gracias por la oportunidad que me dais para poder hablar del grupo. Me ofrecéis toda vuestra ayuda y me ayudáis a caminar porque yo soy… poquita cosa. Estoy dispuesta a lo que haga falta y doy gracias a la Iglesia, que es por la que trabajo, en la línea del Señor.