21 de noviembre de 2010
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El día 30 pasado se desarrolló en Hellín un acto especial para nuestra diócesis. En la Parroquia de la Asunción se celebró una misa de acción de gracias, presidida por el Sr. Obispo, con gran asistencia de sacerdotes, religiosos, religiosas y fieles, en acción de gracias por el centenario del nacimiento de Madre María Luisa Zancajo, fundadora de las Misioneras de la Caridad y la Providencia. Y a continuación se realizó la apertura oficial de su causa de canonización. Estas religiosas tienen su casa madre en Hellín. Allí entrevistamos a la Hermana Nidia Azucena, que es la postuladora de la causa, para que nos explique este acontecimiento.
– ¿Quién es Madre María Luisa Zancajo?
– Madre María Luisa es la Fundadora de las Misioneras de la Caridad y de la Providencia. Nace en el pequeño pueblo de Sinlabajos (Ávila) el 4 de noviembre de 1911. A temprana edad sufre una parálisis infantil teniendo que utilizar muletas toda la vida.
Por su invalidez fue ingresada en un asilo llevado por religiosas, allí vivió veinte años y forjando su espíritu en la escuela del sufrimiento. A los diecisiete años hizo el voto de víctima de amor ofreciéndose al Amor Misericordioso de Dios.
A los 29 años funda la Congregación desplegando todas sus fuerzas en una entrega radical fundamentada en el amor.
En año 1951 con gran espíritu misioneros se inserta en la barriada más pobre de Hellín, Albacete, llamada Cuevas del Campillo, donde, según ella se expresaba, se sentía en su centro.
Muere en Madrid el 5 de junio de 1954. Desde agosto de 1974 sus restos reposan en la capilla de la Casa Madre en Hellín.
– ¿Por qué se ha iniciado la causa de canonización?
– Conociendo su vida en la que resplandecen las virtudes en forma heroica. Además, las personas que convivieron con ella sintieron con su trato un deseo de cambio y de entrega al Señor. Después de muerta, permanece entre todos su fama de santidad, que con el tiempo ha ido creciendo, siendo conocida y acogiéndose a su intercesión no sólo en España sino en distintos países.
– Qué es la apertura de la causa
– Es el acto primero que se hace llamado “sesión de apertura”, donde prestan juramento los que conforman Comisión Delegada que son el Delegado del Obispo, el Promotor de justicia, el Notario y el Postulador. Se da lectura de decretos y semblanza del Siervo de Dios. El Postulador entrega la lista de testigos y el Delegado Episcopal decreta el lugar y día que se celebrará la primera sesión de interrogación, citando al primer testigo. Finaliza con la firma del acta de apertura.
– Qué significa todo esto para la Congregación y para la diócesis de Albacete
– Para la Congregación, es un momento de mucha alegría ver que nuestra Fundadora, primero para nosotras es un modelo de santidad a seguir y segundo modelo de santidad para el pueblo de Dios. Para la Diócesis de Albacete, la Apertura de la Causa de Madre María Luisa es momento de gracia pues es la primera causa de virtudes que se abre en la historia de la Diócesis.