Los Jóvenes de Albacete regresan del Jubileo en Roma con fe renovada

Los Jóvenes de Albacete regresan del Jubileo en Roma con fe renovada

24 de agosto de 2025

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Unos 200 jóvenes de la Diócesis de Albacete han regresado de Roma tras participar en el Jubileo de los Jóvenes, un encuentro internacional que reunió a más de un millón de personas en la capital italiana en torno al papa León XIV.

La experiencia, marcada por la convivencia, la oración y la celebración de la fe -todo ello vivido con una gran alegría compartida-, ha dejado una profunda huella tanto en quienes participaban por primera vez en un encuentro de este tipo como en aquellos que ya habían asistido a otros.

Pedro, seminarista natural de La Roda, relata a su regreso la emoción de ver una Iglesia «joven y con ilusión de vivir la fe». «Merece muchísimo la pena porque ves a gente de todo el mundo guiada por Dios. Son experiencias que te marcan para toda la vida».

Pedro, que anteriormente pudo saludar en persona al papa Francisco, destaca la fuerza del mensaje del papa León a los jóvenes: «Que seamos luz del mundo». «Si ese millón de jóvenes fuéramos luz en nuestras casas, parroquias y estudios, iluminaríamos el mundo entero», confesaba emocionado.

Cada participante guarda en el corazón un recuerdo distinto. Alberto, también seminarista de Albacete, destacó el mensaje del Papa de «salir de nosotros mismos y llevar la alegría del Evangelio».

Los peregrinos estuvieron acompañados en todo momento por el obispo de Albacete, don Ángel Román, que compartió con los jóvenes todo lo programado, los desplazamientos -27 horas en autobús- e incluso el alojamiento. «Eso ha hecho que los jóvenes tengan más confianza con él y que se acerque más la figura del obispo», señaló Pedro.

También lo destaca Pablo, de 18 años: «Me sorprendió su cercanía. Se vino con nosotros en el autobús, compartió todo y nos enseñó lo que es ser humilde. Incluso aguantó nuestro ritmo mejor que algunos».

El propio obispo da gracias a Dios por lo vivido en este Jubileo y, sobre todo, por el «clima que traemos de alegría y de querer transmitir a los demás lo que hemos vivido allí». Este Año Jubilar, añade, está marcado por la esperanza: «Venimos como verdaderos peregrinos de esperanza para continuar con la peregrinación y hacer que todos nos sintamos también llamados a seguir comunicando este gran gozo».

Cristina, de 16 años, vivía su primer encuentro de este tipo y asegura que la multitud de jóvenes reunidos en Roma «llenaba de Dios el ambiente». Para ella, la frase más significativa fue: «La reconciliación sea nuestro camino».

Por su parte, Ricardo, de 18 años, recuerda como inolvidable la Misa en la plaza de San Pedro durante el Encuentro de Españoles: «Miraba a mi alrededor y no me creía estar allí con tantísimas personas. Mons. Luis Argüello nos dijo que un mundo mejor es posible, y eso nos da esperanza».

El sacerdote más joven de la Diócesis, Saúl, también peregrinó acompañando a los jóvenes y agradece a Dios los días vividos con una frase de la homilía del Papa en la Misa de envío: «Aspiren a cosas grandes, a la santidad; no se conformen con menos».

El delegado de Jóvenes de la diócesis, Daniel, subraya que el Jubileo ha sido «una oportunidad para vivir la amistad sincera y relaciones profundas con los demás y con Dios». También resalta el impacto de la Vigilia de Oración en Tor Vergata, donde miles de jóvenes guardaron un profundo silencio en medio del bullicio. Ricardo confirma este como se vivía este momento: «Se podía sentir la oración de todos. El Papa casi no habló, pero transmitía con la mirada. Fue un momento único».

Los jóvenes regresan a casa con entusiasmo después de esta experiencia que definen como «inolvidable». Lo hacen sintiéndose parte de algo más grande que su parroquia o la diócesis: una Iglesia viva que camina unida. Y ya miran con ilusión la próxima gran cita: la Jornada Mundial de la Juventud en Corea del Sur en 2027.

Mientras tanto, la misión es clara: ser luz en medio del mundo, como les pidió el papa León XIV. Y ellos, con su fe sencilla y alegre, parecen dispuestos a cumplirla cada día en su entorno más cercano.