Terminada la Jornada Educativa tuvo lugar un espectacular concierto de Guillermo Esteban, conocido bajo el nombre artístico Grilex, acompañado de su hermano Álvaro.

Cientos de jóvenes se daban cita para cantar, bailar y compartir el testimonio de vida de este rapero cristiano que dijo que los jóvenes «no están vacíos sino desorientados». Grilex ofreció además de su buena música, un testimonio de vida que no olvidarán los asistentes.

Antes de que todo el Auditorio a coro cantase a una sola voz: ¡Cristo vive!, Grilex compartió, entre otras cosas, que le pasó «algo muy fuerte. Hay mucha gente que me sigue en las redes sociales, y allí una chica me mandó un mensaje: «Grilex, que sepas que, gracias a una canción tuya, no me he suicidado». Me impactó tanto que le dediqué una canción a esa chica y a todos aquellos a los que les ronda esa idea en la cabeza, gente que está mal por tristeza, por baja autoestima, por anorexia, por no sentirse amado y aceptado… Y a raíz de eso, me ha vuelto a escribir gente con ese mismo mensaje: «Gracias, porque por tu canción no me he suicidado».

Para Grilex, la solución a la desorientación del joven está en encontrar personas que acompañen, que sean luz, tener encuentros fake to fake o la confesión. Al terminar el concierto, cientos de jóvenes esperaban a las puertas del Auditorio para hacerse una foto, pero también para agradecer su testimonio cargado de humanidad y cercanía.