Un amigo, a través de un móvil, me hizo escuchar la entrevista que un periodista hizo a un político de primera fila, en la que de una manera contundente manifestaba su ateísmo más radical. A otros he oído decir que no creen en Dios, o que Dios no existe, pero lo afirman con cierta humildad, no tan seguros. Este desde la certeza más plena añadía eso que se repite tanto, que la idea de Dios es algo tan privado, que no debe salir de las sacristías. En la plaza pública, en los centros de educación, prohibido hablar de Dios.

Un poco turbado en mi espíritu por estas declaraciones, me pongo a preparar una reflexión para el día de hoy en que celebramos la fiesta de la Sma. Trinidad. Como dicen los franceses celebramos la “fiesta de Dios”. Hoy celebramos también la Jornada “Pro Orantibus” es decir, el día en que la Iglesia ora especialmente por todos los contemplativos, por todos aquellos consagrados, que viviendo en clausura, hacen de su vida una entrega total a Dios y dedican gran parte de su tiempo a orar por nosotros. Es de justicia que si ellos oran por nosotros, también nosotros oremos por ellos.

Este año el lema de la Jornada es: “Sólo Dios basta”. Ya vemos como este lema hace referencia a la Santa de Ávila, ya que estamos celebrando el V Centenario de su nacimiento. Santa Teresa de Jesús en unos versos bellísimos nos dice: “Vengan desamparos, cruces, desgracias- siendo Dios su tesoro, nada le falta. – Id pues bienes del mundo, id dichas vanas,- aunque todo lo pierda, sólo Dios basta”. Y el Papa Francisco haciéndose eco de estos versos, recuerda a los consagrados: “En una cultura de los provisorio, vivan la fidelidad siempre; en un mundo sin esperanza, muestren la fecundidad de un corazón enamorado; en una sociedad con tantos ídolos, sean testigos de que “sólo Dios basta”.

En la Diócesis de Albacete el Cielo nos ha bendecido con la suerte de tener siete Monasterios de Clausura, es decir, de Contemplativas cuya fiesta celebramos hoy. En Villarrobledo tenemos tres: HH Clarisas, HH Carmelitas Descalzas y HH Cistercienses Bernardas. En Hellín tenemos otro Monasterio de Clarisas; en Albacete capital, otro Convento de Carmelitas Descalzas. En Caudete las Carmelitas de la Antigua Observancia y el Alcaraz las Franciscanas de la T.O.R. Para todas ellas nuestro agradecimiento y nuestra oración para que sigan despertando en notros la conciencia de que Dios existe y el amor que Él nos tiene y cuál debe ser nuestra respuesta de amor.

Así pues en el día de hoy queremos reavivar nuestra fe en la Sma. Trinidad, la fe en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en cuyo nombre fuimos bautizados. Y queremos afirmar que no entendemos el sentido de nuestras vidas sin Dios. Cuando la cultura secularista que nos envuelve quisiera borrar de nuestros ambientes toda huella de Dios, nosotros reafirmamos nuestra fe y amor. Ante el grito creciente de los que dicen: “Dios no existe” nuestras hermanas Contemplativas, desde el silencio de sus Conventos, nos gritan, que sí existe y que ellas dedican mucho tiempo de su vida a hablar con Él. Intentan dar todo su amor y desde este amor entregado, rezan por todos nosotros. S. Agustín decía que puesto que hemos sido creados por él, estaremos inquietos hasta no descansar en Él. Podemos añadir, si la humanidad ha sido creada por Dios, esta no encontrará su paz y armonía hasta que no se encuentre con Él. Esto es lo que nos recuerdan cada día  nuestros Contemplativos.