Estos días infinidad de comunidades cristianas  han hecho, en el ancho mundo, un gran maratón de horas de adoración ante el Santísimo Sacramento  para recordar los sesenta años de la  ordenación sacerdotal que cumplió estos días el Papa Benedicto XVI.

Le preguntaron al Papa: ¿qué le hace ilusión, Santo Padre, que le regalemos en una efeméride tan importante? A estas alturas, respondió Benedicto XVI,  no necesito más que me regaléis muchas oraciones, oraciones para dar gracias a Dios por el don que me concedió en el sacerdocio y oraciones para pedir que no falten vocaciones sacerdotales en su Iglesia.

Así pues, unidos a esta gran cadena de oraciones en el mundo por el Papa, también cristianos de Albacete, en la Capilla de la Adoración Permanente en el  colegio de la Compañía de María, en la Enseñanza, han hecho guardia durante sesenta horas  de oración continua. Inauguró la oración el miércoles muy de mañana el Sr. Obispo con la celebración de la Eucaristía y fue  clausurarla el viernes por la tarde, en unas solemnes vísperas por el Vicario de Zona D. Luis Enrique.

En un tiempo se hizo célebre aquella expresión. “Dile con flores que le amas” Hoy le decimos al Papa Benedicto, en el recuerdo de sus sesenta años como cura, y al celebrar también  el “Día del Papa” en la fiesta de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, que le queremos mucho y se lo decimos con flores y con oraciones. Pedimos al cielo que este joven de ochenta y cuatro años  pueda seguir guiando a la Iglesia con su sabiduría y su humilde bondad. Que siga recordando al mundo que con Dios lo tenemos todo y que es una desgracia muy grande para el hombre quedarse sin Él.