25 de septiembre de 2018

|

69

Visitas: 69

Querido hermano Ángel: ¡Bienvenido como nuevo pastor a esta Iglesia de Albacete!

¡Ten la seguridad de que eres bienvenido! Porque Albacete, que es tierra buena y mejor gente, te acoge, lo sé, con el corazón y los brazos abiertos. Ya lo irás viendo y experimentando con tus propios ojos.

Eres bienvenido porque sabemos de tu calidad humana y espiritual, de tu sencillez, que tan bien disimula tu hondura intelectual. Sí, porque tu competencia profesoral ha corrido pareja con tu fina sensibilidad pastoral, sin romperse ni reñir la una con la otra.

Verás qué buenos hermanos y colaboradores encuentras en el presbiterio diocesano. Y verás que, si alguien dijera otra cosa, se equivoca. Vas a encontrar un presbítero sobrado de años, en muchos de sus miembros, pero también sobrado de generosidad.

Vas a encontrar comunidades religiosas admirables, que son laboratorios de oxígeno espiritual y caricia de Dios para los pobres y los necesitados.

Vas a encontrar miles de cristianos laicos que se sienten Iglesia, que aman a la Iglesia, que se sienten corresponsable de su presente y su futuro. Son miles los voluntarios en el ámbito de la catequesis, de la liturgia, de la acción caritativo-social.

Y vas a encontrar, qué te voy a decir yo que tú no sepas, que también aquí es real la secularización galopante, el eclipse de Dios en la mente y en el corazón de muchas personas, incluso bautizadas. Por eso estamos embarcados en la Misión Diocesana, ahondando en lo que significa ser discípulos, para ser misioneros. La crisis religiosa es fuerte, pero tenemos la seguridad de que nuestra Iglesia recuperará su fuerza evangelizadora en la medida en que recupere la frescura evangélica de la primera hora, el encuentro con Jesús, pues, como dice el Papa Francisco, con Él siempre nace y renace la alegría(EG 1).

Querido Ángel: Te paso el testigo con mucho gusto, con profunda gratitud a esta Iglesia de la que he recibido tanto, y que ahora te acoge como padre y pastor.

+Mons. Ciriaco Benavente Mateos
Administrador Apostólico de la Diócesis de Albacete