7 de septiembre de 2015

|

55

Visitas: 55

Llega la Feria. Nos visita puntualmente cada año. Aunque soñada y esperada, irrumpe siempre como una novedad. ¡Siempre antigua, tradicional, manchega, y siempre nueva! La Feria  todo lo conmueve y remueve; y todo lo tonifica. El pistoletazo de salida lo da la imponente cabalgata de la tarde del día 7, que preside y cierra la Virgen de los Llanos, porque no en vano la Feria surgió a la sombra de la Virgen y en su honor fue confirmada como tal hace más de tres siglos. La lluvia de aplausos con que la imagen de la Virgen es saludada a lo largo de las calles evoca sin esfuerzo los versos del poeta gaditano: “En un barco de luces/ vas/ por la alta marea de la ciudad”.

No hay feria sin carpas, sin casetas, sin luces, sin colores y sonidos, sin olor a cocina y a churros. Cada año pienso con gratitud en los “feriantes”, hombres y mujeres, bombardeados permanentemente por tantos decibelios o por las luces intermitentes de las numerosas atracciones. Ellos, incansables, nos alegran la Feria a los mayores y son las delicias de los niños.

Pero la feria es más: Es, sobre todo, encuentro y convivencia, saludo e intercambio, convidarse a una copa de vino o a compartir los “miguelitos de la Roda”. El ferial se convierte cada año en cuarto de estar de Albacete, en plaza mayor de la Mancha. En la Feria siempre hay tiempo para los demás. Deseamos, por eso, que la alegría de la Feria llegue a todos.

Que en nuestra Feria abramos los cerrojos del alma y oigamos bombear acogida y amistad al mejor corazón de Albacete. No olvidemos a los enfermos, a los que no tienen trabajo, a tantos inmigrantes que vagan por las calles suspirando por un futuro mejor. Y, como digo siempre desde el respeto para quienes no comparten nuestra fe: No olviden que Nuestra Señora de los Llanos, desde su capilla en el ferial, pone la mejor esencia de ternura, de amor y de alegría en nuestra Feria. Porque es madre, su empeño es hacer familia, crear fraternidad ¡Que Ella nos conceda gozar de una Buena Feria!

                            +Ciriaco Benavente                                                                                            Obispo de Albacete