En una de las noches de la Semana de Música Religiosa de Hellín cantó la Coral de los Niños Cantores de Saint Marc de Lyon. Fueron estos los que tuvieron el honor de interpretar la banda sonora de la excelente y conocida película “Los Niños del Coro”.

Dado que se trataba de un coro de niños, añadido a esto el reclamo publicitario de la célebre película, el Templo de la Asunción se lleno hasta los topes, estaba a rebosar. Allá encontrabas a todos los públicos: abuelos, papás, jóvenes y niños. Comprendes muy bien cómo una madre, un padre no podía por menos que invitar a sus pequeños, tal vez entretenidos en la consola, o en Internet, para que viesen a chiquillos de su edad haciendo cosas tan hermosas.

Durante hora y media nos deleitaron los chicos con sus cantos. La reflexión que yo me hacía mientras cantaban era esta: ¡Cuántas horas de trabajo, de ensayo, de esfuerzo, de disciplina para llegar a este concierto! Los chicos cantaron todo de memoria, ni partituras ni papeles. Las manos echadas a la espalda y los ojos fijos en la batuta del director. Los pequeños, naturalmente por su buen hacer, cosecharon muchos aplausos.

Mientras escuchaba el concierto, me venía también a la mente el tema de la película “Los Chicos del Coro”. En aquel internado en que se querían imponer las maneras duras de represión, de castigos por parte de la dirección, sin fruto alguno, un trabajador, cuidador de los chicos, antiguo profesor de música, comprendió que era mejor camino educativo el de la bondad, el de interesarles por algo, llenar su tiempo con algo hermoso, en su caso la música que es lo que él sabía. De esta manera nació el célebre coro.

Ahora que estamos en tiempos de Pascua, los “Niños del Coro” son para nosotros un gran testimonio de resurrección. Son un testimonio del triunfo del bien sobre el mal, de la vida sobre la muerte. Chicos que aprenden a cantar como los ángeles, es difícil que malos demonios llamen a su puerta. En estos tiempos en que nuestro sistema educativo está tan en crisis, cuántas cosas podemos aprender de los “Niños del Coro”.